Almirarte

El primer día fue de reflexión, y parece que lo importante es que inicio este viaje en paz, sensación históricamente esquiva para mí. Hice en Santiago todo lo que tenía que hacer: me despedí de mi familia, de mis amigos más cercanos, traspasé mi trabajo a uno de ellos (espero que le rinda tantos o más frutos que a mí en su momento), le dije a la mujer que me gustaba (sin chance de antemano, así que no había problema), cerré otro par de temas con personas importantes; nada quedó pendiente que me haya dado cuenta hasta ahora.

Estoy en Almirarte, la casa-restaurante de la Vicky, una gran e inesperada amiga producto de la casualidad más voluntad, es decir, la vida (aunque escucho cierta voz rezongando por lo simplista de la figura). Nos conocimos en Preguntados, ese ex-popular juego de celular de preguntas y respuestas y competencia, y como jugamos bastante comenzamos a conversar. Luego ella fue a Chile con unas amigas, visitamos Valpo, y yo vine una vez antes, esta es la segunda, abusando de su beata hospitalidad. Mi aporte, hasta ahora, se ha circunscrito casi exclusivamente a lavar platos. Es poco, pero espero que aumente paulatina o explosivamente.

Mendoza es una ciudad verdecita, tranquila, millón y medio de habitantes, principalmente argentin@s buena onda. El barrio donde estoy es bastante residencial, pero cercano al centro. Algo así como Providencia, pero el aire libre de material particulado y bocinazos.  Hay también varios parques, pero lamentablemente los están empezando a enrejar chilenamente, ya que Chile es modelo para un sector de la sociedad acá (que claramente no cacha nada).

Practico todo lo que puedo el ukelele. Está difícil, jamás había tocado un instrumento de cuerda, ni realmente ningún instrumento de manera cuasiseria o semisistemática, así que paso por la fase más primaria: aprender a rasguear sin pifias, siguiendo un ritmo básico, casi siempre La Bamba, para desgracia de mis involuntari@s escuchas. El cambio de F a G me tiene complejo, por lo que le he estado dando a eso gran parte del tiempo. C-F-G-C-F-G-C-F-G-C-F-G (x 1000). Trato de ir a lugares diferentes a practicarlo para no ser declarado chileno non grato tan pronto. Intenté también acompañar con una silbada de melodía y fue un desastre, quedará para más adelante.

Por ahora, el futuro cercano se ve apacible. Ayudaré en lo que pueda en Almirarte, y veré qué otra cosa se presenta por ahí.